El Comité Comarcal de la Unión del Pueblo Leonés (UPL) en La Bañeza ha emitido un comunicado alertando sobre la crítica situación demográfica que atraviesa la provincia de León, especialmente en la zona del Partido Judicial de La Bañeza. Según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística (INE), municipios como San Adrián del Valle han experimentado una pérdida poblacional del 9 % en un solo año.
En el último periodo registrado, la provincia de León ha visto disminuir su población en 1.018 personas, lo que equivale al 0,23 % de su población total, una cifra similar al tamaño del municipio de Santa Elena de Jamuz. Sin embargo, en el Partido Judicial de La Bañeza la situación es aún más preocupante, ya que la pérdida de habitantes multiplica por cuatro la media provincial. De cada tres habitantes que abandona la provincia, uno pertenece a esta zona, lo que representa el 28,8 % del total.
Municipios como Alija del Infantado y San Esteban de Nogales también registran descensos significativos, superiores al 3 %. En La Bañeza, la pérdida alcanza los 24 habitantes, pasando de 10.047 a 10.023, y ninguno de los grandes municipios de la comarca ha conseguido ganar población.
Ligeras excepciones en la tendencia
A pesar del panorama general, algunos municipios del Partido Judicial de La Bañeza han registrado crecimientos modestos. Palacios de la Valduerna ha sumado dos habitantes, Soto de la Vega seis, y Castrillo de la Valduerna uno. Otros, como Cebrones del Río, Pobladura de Pelayo García, Quintana y Congosto, y Regueras de Arriba han logrado mantener su población estable.
Reclamo de medidas urgentes
Desde la UPL se exige la implementación de políticas autonómicas y estatales efectivas para revertir esta dinámica de despoblación, que achacan al «centralismo de la Junta de Castilla y León y del Gobierno central. La falta de inversión en infraestructuras, comunicación y desarrollo empresarial obliga a muchas personas, especialmente jóvenes, a abandonar la región en busca de oportunidades», aseguran.
Además, el comité señala que la pertenencia de León a Castilla y León dificulta el acceso a fondos europeos destinados a regiones desfavorecidas, como los NUTS 2, que en el pasado han permitido revertir situaciones similares en otras partes de Europa, como las Highlands escocesas.
Según la UPL, provincias como Burgos y Valladolid, con un nivel de renta per cápita elevado, distorsionan las estadísticas regionales, impidiendo que León pueda beneficiarse de estas ayudas esenciales para frenar el éxodo poblacional y la pérdida de tejido social y económico.